El internado: abriendo caminos

Hace unos días escuchábamos a Raúl decir en una de sus entrevistas que estaba sorprendido por el éxito cosechado por El internado, que ha permitido a la serie llegar sin problemas de audiencia hasta su sexta temporada. No seáis malpensados; en la entrevista Raúl dejaba claro que su sorpresa no estaba motivada por la falta de confianza en el producto en el que sus huesos fueron a parar hace ya un par de años, sino en lo difícil que resulta para cualquier serie que un número suficiente de espectadores decida emplear su tiempo en contemplarla.

Lo cierto es que el éxito de El internado llama aún más la atención, si se tiene en cuenta que una buena parte de las producciones que conseguían buenos resultados en el momento en que llegó a la parrilla, no habían cambiado demasiado su patrón desde los gloriosos tiempos de Farmacia de Guardia o Médico de familia. En definitiva la ficción española llevaba mucho tiempo decantándose por series de temáticas recurrentes y bastante simples, corte familiar y lo que era menos alentador, mínimo riesgo.

Pero llegó El internado y consiguió audiencias más que aceptables introduciendo en el panorama televisivo elementos diferenciadores de otros productos: el misterio como base sobre la que construir una historia, los fenómenos sobrenaturales completando la atmósfera inquietante (vale, en ocasiones cutres y mal llevados, pero no podemos negar que la serie fue pionera en incorporarlos), el empleo de flashbacks para explicar situaciones presentes, la temática nazi como telón de fondo, … Algo de esto contamos hace ya tiempo en una de nuestras actualizaciones, y algo de esto cuenta también el artículo publicado en la revista Cine y acción que samureta consiguió para la webforo.

Como bien apunta este último texto, antes de El internado algunas producciones como El pantano o Círculo rojo intentaron hacer comulgar a los televidentes de este país con el misterio, pero ninguna de ellas encontró el éxito como recompensa. Para los que no hayáis hecho click en el enlace, diré que además, el artículo considera que el haber sabido ver que este género interesaba sobre todo al sector adolescente, es uno de los grandes aciertos de la serie. Bien, pues éste es uno de los puntos con los que yo no acabo de concordar, porque me consta, y este blog es buena prueba de ello, que esta producción ha conseguido enganchar también a ese público joven pero ya adulto, que El pantano o Círculo rojo buscaban para sí.

No obstante, tampoco quiero ponerme demasiado quisquillosa, porque el análisis general que la revista realiza me resulta bastante interesante, y porque coincido plenamente con la idea de que El internado abrió un nuevo camino para la ficción televisiva española. Como ejemplo ilustrativo puede valer Hay alguien ahí, la serie de Cuatro que se ha arriesgado a contar una historia diferente, utilizando los fenómenos paranormales como pilar sustentador. Ambas series distan bastante en casi todos los aspectos, pero cabe pensar que el buen funcionamiento de El internado ha podido ayudar a que los responsables de la ficción española comprueben que asumir riesgos no tiene por qué ser necesariamente malo.

Ya os podéis imaginar que estando colgado este artículo donde lo está, no todo van a ser flores para la serie de Globomedia, porque ¿qué sería de nosotras sin poder repartir estopa a diestro y siniestro?

A pesar de las innovaciones que El internado trajo debajo del brazo, mantiene una tradición bastante arraigada en nuestras series: la de buscar espectadores con edades comprendidas entre los 5 y los 90 años. La propia Laura Belloso explicaba hace unos días en el I Festival de Televisión de Vitoria, que la productora “tiene la ambición generalista de llegar a todos los públicos”. Esto, que por si sólo no constituye una garantía de éxito, es a mi entender más responsable del triunfo de El internado, que el hecho de contar con unos cuantos pseudoadolescentes buenorros entre sus filas. Pero a su vez, este target tan amplio que busca, no sólo esta serie, sino la mayor de las producciones nacionales, constituye una carga que impide a los productos patrios alcanzar el nivel de la idolatrada ficción americana. Vale, no tanto como las diferencias de presupuesto entre unas y otras, pero también influye.

En definitiva, El internado no es aún esa gran serie de producción netamente española que romperá todos los moldes, pero al menos consigue comenzar a resquebrajarlos.

4 comentarios:

Nicole dijo...

Estupendo el articulo Parchis. Yo ya os comente en su dia que empece a ver la serie con bastante escepticismo, y luego al final me engancho. Claro que Raul tuvo mucho que ver con mi enganche, pero es que no me podreis culpar por eso. :P

Chiqui dijo...

Muy bien artículo, compañera.
Yo creo que en España todavía hay mucha mieditis ha crear una serie para un determinado sector que no sea el adolescente, al estilo de lo que ha hecho Lost, cuyo media está en un público ya adulto con unos determinados gustos e intereses. Pero si somos realistas, aquí somos muchos menos para ver la tele, y eso se traduce en más riesgo a la hora de crear un producto así.

"El Internado", en su origen, en sus dos primeras temporadas, a mí me parece un ejemplo bastante bueno de cómo se puede crear una buena serie para todos los públicos, con elementos fantásticos, románticos y de suspense. Pero cojea de lo de siempre. Si va bien, hay que alargarlo, y de ahí han venido todas las taras que le han ido surgiendo a la serie después.

parchis dijo...

Gracias chicas. Yo confío en que la historia ésta de la TDT vaya avanzando, y pueda haber cada vez canales más específicos. Supongo yo que al repartirse cada vez más las audiencias, sea más fácil crear series de calidad, con miga (no rollo Física o química :P), que no vayan dirigidos a las grandes masas, sino a un público más concreto.

Pero claro, si yo tuviera que poner el dinero para producir una serie, igual veía las cosas de otra manera :P

samureta dijo...

Ehn el artículo de cine y acción también se incluye la serie de hay alguien ahí.
La pena eds que esta serie tan innovadora corra el riesgo de vivir en una travesía ebn el desierto durante las dos o tres temporadas más que quedan por hacer. ¿Alguien ve trama para esas temporadas?