Está confirmado, el próximo miércoles 2 de junio El internado regresa a nuestras pantallas con su última temporada. Para aquellos que han dejado que la serie se cuele en sus vidas más allá de lo habitual, se cierra en cierto modo una etapa, y cuando esto ocurre, es momento de echar la vista atrás y recordar todo aquello que la experiencia nos ha brindado. Ésta es la visión al respecto de nuestra Bea; no dejéis de leerla:
Tres años pueden parecer un periodo de tiempo muy corto o interminable según se mire. Justo ese tiempo hace ahora cuando mi hermana me aconsejó ver una serie que iba a empezar y yo más por cabezonería que por el examen que tenía cercano olvidé sus palabras. Probablemente en uno de mis exilios voluntarios al salón puse el televisor un noviembre en que me encontraba algo desanimada pululando por cursos que se me hacían cuesta arriba y trabajos que no acababan de fructificar y así casi de manera casual me encontré con la serie.
Cuando descubrí a Fermín en pantalla ni siquiera me llamó la atención preocupándose por su compañera al no recibir noticias de su hijo. Su cara no me sonaba, ni su voz, y ni siquiera había reconocido al actor que trabajaba en un par de anuncios que tenía olvidados. De hecho aquel primer episodio me aburrió pero decidí darle otra oportunidad y el flash back carcelario de Carlos Almansa fue el primer interés que me despertó de cosas que me llegaron a gustar de esta serie sin saber lo que significaría para mí. Al igual que cuando escribes hay personajes que estiran de ti porque son interesantes y perdurarán en tu memoria sin pretenderlo en un principio y desde el desconocimiento tal y como cuando uno va dibujando en su mente como será hasta que se convierte en alguien “querido y conocido”. Y eso fue lo que a mí me pasó. Fermín tiene tantas cosas con las que uno puede identificarse, que es difícil no convertirlo en entretenimiento puro y todas se me fueron presentando poco a poco. Y es que aparte de poseer cámaras-colgantes, cuadros del bosco, y material extravagante para realizar su misión que de por si ya me llamaban la atención pues por algo ya era yo fan de un personaje ochentero que te montaba cualquier artefacto en dos minutos, él es el momento de soledad que alguien ha tenido mirando su móvil, o la furia que se desprende de ti cuando peligra quien quieres más que a ti mismo, aunque a veces les hagas daño llegando a descubrir cosas que no te gustan de estos o incluso de ti mismo. Porque a veces pecamos de valientes y otras de cobardes y nos escudamos en nuestro sentido del humor para hacer la vida más bonita. O porque uno no está nunca al cien por cien seguro en el camino que va recorriendo. Así como el amor o el dolor tan reales que transmite. Y es que sus acciones y sus sentimientos no son tan lejanos, pero a veces también imprevisibles y por eso me gustan, y por eso estaría contando cosas sobre él durante tanto tiempo.
Dentro de poco se acabará la serie, y como mucha gente me he preguntado como será el final del personaje, no sé si vivirá o morirá como andamos debatiendo en los últimos tiempos, si será un maravilloso punto y aparte o si quizás tenga la duda que me ofrezcan algo digno pero estaré ahí para verlo. No será para mí el fin de un simple entretenimiento sin más, porque me recordará los mensajes al móvil que me llegaban con opiniones del capítulo que yo aún no había podido ver, el foro con todas las entrevistas, reportajes, saludos y tantas risas, este blog que fui frecuentando poco a poco cada vez más pero sobre todo el momento en que vi a chiqui sentada en la barandilla del parque por primera vez, la voz de escarlata, el portal de la vecindad de la guindalera, aquel sobre inesperado que me hizo sonreír todo el día, y hablando de sonrisas la de forna en aquella esquina, o el recuerdo de parchís asomándose por aquella puerta o cuando Luci nos sorprendió por la espalda a todas y la figura de Raúl saliendo por la puerta para charlar contigo como uno más. Miles de pequeños detalles que seguirán mucho tiempo después ahí.
Por todas esas cosas me alegro de haber encendido la tele ese día.